Salvan El Tambito

En 2014 distintas organizaciones vecinales dieron el alerta por el abandono de uno de los locales que Jardín Japonés.

acuñó el tango en Buenos Aires, a fines de 1800, El Tambito, lugar que hace a la historia del tango escondido en los llamados Bosques de Palermo, sobre la calle Adolfo Berro, a la vuelta del
Abandonado por más de seis años, tras funcionar como sede actividades del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, empezó a restaurarse en mayo de 2015.

La ONG change.org juntó firmas con ese propósito, señalando que "junto con el café Hansen y el Velódromo, el Tambito conformaba un tradicional circuito de tango del Buenos Aires de fines del XIX y principios del XX. Escenario no sólo de la música y el baile, sino también de peleas entre malevos y compadritos, el local padeció una clausura temporal por un hecho de sangre que llegó a la crónica policial".
El Tambito, historia y patrimonio del tango porteño 
De esos tres lugares, queda El Tambito. Se lo conoció también como El Tambo porque fue exactamente un tambo, que repartía leche al pie de la vaca, pero a la noche se convertía en local de baile y hasta fue escenario de un duelo en medio de esas diversiones. Tuvo otros nombres también como Kiosco Casares o el Kiosquito y Café Francés.
El lote lo había alquila Vicente Casares que fue un promotor de la industria lechera que firmó un convenio el 1 de octubre de 1877 con la Comisión Auxiliar del Parque Tres de Febrero.
Ese documento era un contrato mediante elcual Casares alquilaba por cinco años "un kiosco y terreno con 40 varas de frente al este sobre la avenida Sarmiento y 40 varas de fondo sobre el camino de los Paraísos, por el alquiler mensual de cuatrocientos pesos moneda nacional pagaderos por trimestres adelantados / Art. 2. Don Vicente L. casares establecerá en dicho terreno una lechería”.
Después lo alquilaron Leopoldo Monmont y varios más. Según el guitarrista Esusebio Aspiazú, decía que el tango Don Juan se estrenó en El tambito en 1898 dedicado al dueño del lugar que por entonces fue el inquilino Juan Pastoriza.
Cuenta la historia que un 22 de diciembre de 1901, Juan Carlos Argerich un joven de 21 años de clase acomodada porteña a quien llamaban "Vidalita" obligó a los músicos a que repitieran el tanto La Tirana y los instrumentistas se negaba. Salió en defensa entonces Juan Traverso, otro joven pero de 28 años- Lo llamaban "cielito" y se trezó a cuchillazos, matando a Vidalita. Traverso fue preso y a los dos años obtuvo libertad con la condición de irse del país. Se radicó en Uruguay donde murió en 1921.
Por su historia, por su arquitectura, por su encato, es aplaudida su conservación.

Comentarios